Wednesday, February 24, 2010

Bitácora Caminante - Sudamérica, Parte I

11/12/07
Buenos Aires, Capital

Una de cal, una de arena y otra de Gardel

"Mi Buenos Aires querido, cuando yo te vuelva a ver..."
Contrariando al tango, esta Buenos Aires, que ya poco tiene de mía, o ya poco tengo de ella; esta Buenos Aires, llora por sus penas y calla por su olvido.
Llora, un poco de rabia, un tanto de impotencia, y otro tanto más de tanguera que es, nomás... Veo y camino y me mezclo sin mezclarme, y pienso - este lugar no cambia, evoluciona; es decir, nada se modifica, nada cambia realmente de forma, sino más bien se exageran sus facciones, se deforman, se desproporcionan.
Cuando me fui, me fui de una ciudad violenta. Hoy retorno a una ciudad que te noquea, sin darte cuenta siquiera que subiste al ring. Sus mañas no han cambiado, se potenciaron. Sus defectos, cada vez más visibles; sus virtudes, de acceso limitado.
Como buena cosmopolita que es, toda propuesta es vertiginosa. A un ritmo que te obliga a seguirlo, si es que querés sobrevivir. Pero no es ninguna tonta, la Capital Federal de esta República Argentina... sabe venderse bien, sabe promocionarse. Y siempre, pero siempre, hay un postor.
Si es que, como dicen, las aperiencias engañan, esta ciudad es la reina de la ilusión. Sus edificios se erigen con la misma rapidez con que los pibes desarman cartones en la esquina... cada vez más. Más cartones, y más pibes, sobre todo. Puerto Madero crece tanto que tapa la villa, pero la villa ahí está. Los barcitos chetos de Palermo Hollywood (what the fuck, cuando me fui todavía se llamaba Plazita Serrano!!!) se llenan con la misma rapidez y desesperación que los vagones de tren que van y vienen del oeste, del sur, de dónde no!!!???
Pero si venís de afuera, no te dejes engañar, che! La Argentina florece, la Argentina se va para arriba... si ahora hay una presidenta, acaso hay algo que sea más primer-mundista???

17/12/07
Buenos Aires, Capital

Las fragantes aventuras de Mario y sus (in)controladores de ansiedad

21 días. Mucho ruido, gritos, motores, bocinas, puteadas, cumbia, reggeaton... ruido!
21días. Mucho pan con manteca, facturas, milanesas napolitanas con papas fritas, pizza, empanadas, hamburguesas, helados, postres demás.
21 días. Calle, chicas, ropas, te miro de arriba a abajo porque me pareces raro, te miro y si me mirás no te miro y luego te miro de nuevo.
21 días. Te doy mi número y si querés llamáme, podemos salir a charlar, a tomar algo pero, eso sí, coger no. En realidad, sí, pero igual te digo lo contrario.
Todo eso y mucho más, pude encontrar, en 21 días nomás, que llevo en este bazar...
Todo eso mientras el Indio suena a pleno en la 100, linda ironía de la vida, quien más escapa es el más buscado... es que todo está de oferta en esta Buenos Aires, nunca duerme, siempre alerta...

1 comment:

  1. Una de cal y una de arena....Tal cual! Lamentablemente perfecta descripciòn de esta Buenos Aires de gardel....
    Paty

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